Se ha hablado mucho de los trucos de casino. Algunos tuvieron éxito y otros fracasaron incluso antes de ponerse en práctica. Hablemos de los tramposos que lograron vencer al casino en la ruleta.
El famoso fraude
Lo primero es lo primero.
No es ningún secreto que ganar a la ruleta limpiamente es imposible.
Pero estos estafadores fueron increíblemente listos y lo consiguieron. No sólo utilizaron su equipo, sino también el del casino. Uno de los estafadores creó una forma de manejar la bola con el mando a distancia. Los tramposos sabían el número que la bola estaba a punto de golpear y el sector de la ruleta. Esto les daba una enorme ventaja sobre la casa.
Sin embargo, para poner en práctica este plan, tuvieron que encontrar la forma de sustituir la bola por su control remoto. Para ello, involucraron a uno de los crupieres.
- Antes de su turno, el crupier cambiaba la bola y la devolvía al marcharse.
- Otra cuestión igualmente importante era cómo utilizar el mando a distancia. Al fin y al cabo, tenía que estar a no más de dos metros de la ruleta.
- En el equipo de los tramposos había una chica guapísima.
- Se decidió que escondería el mando en un paquete de cigarrillos. La chica lo sujetaba entre sus brazos y, cuando era necesario, pulsaba el botón.
Ya ves lo sencillo y brillante que era.
Detalles del tramposo
El engaño tuvo éxito. Les reportó unos 500.000 en una semana. La dirección del casino vio que habían perdido dinero, pero no entendía por qué. Esta trampa tuvo lugar en Francia en 1973. Los ordenadores y los dispositivos móviles no eran tan comunes por aquel entonces, así que era bastante difícil atrapar a los tramposos.
El equipo pensó en los pequeños matices.
Lo único que se les escapó fue que la chica con un paquete de cigarrillos nunca fumaba.
Al principio, nadie le prestó atención. Pero una noche, se encaprichó de uno de los dueños del casino. Pronto se dio cuenta de los cigarrillos. Tenía dos respuestas.
- La primera era que ella estaba dejando de fumar.
- Pero él se inclinaba más por la segunda versión, que ésa era la razón de las pérdidas del casino.
Es fácil adivinar lo que pasó después.
El final
Una noche, el casino buscaba tranquilamente a los tramposos. Uno de los guardias le pidió un cigarrillo a la chica, pero ésta no tuvo tiempo ni de abrir el paquete, ya que estaba esposada. Atraparon a todo el equipo.
Consiguieron ganar más de un millón en el casino mientras hacían trampas. El tribunal ordenó a los tramposos que devolvieran todo el dinero al casino. A pesar de esta genial idea, los tramposos se quedaron con los bolsillos vacíos y se les prohibió jugar en los casinos locales.