

La percepción del riesgo en el juego se refiere a la forma en que las personas entienden y evalúan los peligros y recompensas potenciales asociados a las actividades de juego. Abarca la compleja interacción de factores cognitivos, emocionales y sociales que influyen en la evaluación que hace una persona de los resultados del juego, que a menudo difieren de las probabilidades matemáticas. Una percepción precisa del riesgo es crucial para promover comportamientos de juego responsables y prevenir la ludopatía.